La iluminación desempeña un papel crucial en la ganadería, ya que influye directamente en la salud y el bienestar de los animales, así como en la eficiencia de la producción. Con el tiempo, sin embargo, la eficiencia de los sistemas de iluminación se deteriora, reduciendo su eficacia y, en última instancia, costando dinero a los ganaderos.
Invertir en un sistema de iluminación de última generación supone un coste relativamente pequeño en comparación con los gastos generales de funcionamiento de una nave avícola o porcina, pero los beneficios pueden ser considerables.
Muchas explotaciones ganaderas siguen funcionando con sistemas de iluminación que tienen 10 años o más. Lo que muchos ganaderos no saben es que la eficiencia de estos sistemas disminuye gradualmente, lo que significa que los animales no reciben niveles óptimos de luz. Esto puede afectar negativamente a su comportamiento, tasas de crecimiento y bienestar general.
En aves de corral y cerdos, las malas condiciones de iluminación se han relacionado con un aumento del estrés, una reducción de la eficiencia de conversión del alimento y un aumento de las tasas de mortalidad.
Los ganaderos centrados en maximizar la productividad deben tener en cuenta el coste de mantener un sistema obsoleto. Una disminución de la eficiencia a lo largo del tiempo no sólo significa facturas de electricidad más elevadas, sino también un menor rendimiento de la producción y un mayor riesgo de problemas relacionados con el bienestar.
Si tenemos en cuenta los costes de insumos clave, como la genética, los piensos, el aire (clima), el agua y la luz.
Si se compara con las pérdidas potenciales derivadas de la baja productividad, los problemas de salud relacionados con el estrés y el uso ineficiente de la energía, la inversión adicional se amortiza con creces.
En la última década, los sistemas de iluminación han evolucionado de forma espectacular. En la actualidad, las soluciones avanzadas van más allá de la mera iluminación:reproducen los ciclos de luz natural y ofrecen ventajas prácticas que responden a muchos de los problemas de bienestar planteados por los reguladores del sector y los consumidores.
Al imitar los patrones de luz natural, estos sistemas ayudan a regular los ritmos circadianos de los animales, fomentando comportamientos más saludables, mejores tasas de crecimiento y un mayor bienestar general. Esto se traduce directamente en una mayor productividad y menores tasas de mortalidad, lo que beneficia tanto a los animales como a la cuenta de resultados del ganadero.
En cualquier explotación ganadera, múltiples factores pueden influir en la producción: la calidad del alimento, los brotes de enfermedades, las condiciones ambientales y la genética, por nombrar algunos. Un sistema de iluminación bien diseñado proporciona un nivel de seguridad al garantizar que la iluminación nunca sea un factor limitante del rendimiento.
Cuando surgen problemas, los ganaderos que han invertido en iluminación de alta calidad pueden al menos estar seguros de que los niveles de luz, los espectros de color y los ciclos día/noche están optimizados, lo que reduce el estrés innecesario de sus animales. Este nivel de control es inestimable para mantener una producción constante y el bienestar de los animales.
La investigación científica ha demostrado que determinados espectros de luz pueden mejorar el rendimiento del ganado:
Estos beneficios suelen hacerse patentes en el primer año de instalación, lo que significa que la inversión en un sistema de iluminación moderno puede recuperarse varias veces en un corto periodo de tiempo.
Si sigue utilizando un sistema de iluminación antiguo, es el momento de solicitar una evaluación a su proveedor tecnológico. Conocer la eficiencia real de su instalación actual puede ayudarle a tomar una decisión informada sobre si es necesaria una actualización.
Los agricultores con visión de futuro saben que las inversiones estratégicas generan mayores beneficios. Actualizar su sistema de iluminación no es sólo un gasto: es una inversión en bienestar animal, productividad y rentabilidad a largo plazo.